Tipo de ruta: Circular
Lugar de inicio: Alzira, Ribera Alta, Valencia
Hora de inicio: 8 h 01 min
Duración: 3 h 45 min
Distancia: 7,5 Km
Dificultad: Media
Altura mínima: 111 m
Altura máxima: 544 m
Calificación (1-10): 8
Recorrido: Caseta del Guarda de la Murta – El Peiró – Nevera – Puente de Felipe II – Senda PR-CV 334 – Cruce a la Font de la Murta – Pas de San Sofí – Creu del Cardenal – Pas de San Sofí – Font de la Murta – Monasterio de Santa María de la Murta – Cruce de los Corrales del monasterio – Caseta del Guarda de la Murta.
Saldremos
de Algemesí por el Parque Salvador Castell, cruzaremos el rió Magro
por un puente y por la CV-42, nos dirigiremos hacia la población de
Alzira. Seguiremos por la CV-50 con dirección a Tavernes de la
Valldigna y nada mas salir de Alzira nos encontraremos con una
rotonda con unas figuras en el centro y un bingo a nuestra izquierda,
nosotros nos desviaremos por la izquierda del bingo, por la Avinguda
de Vicente Vidal, enseguida llegaremos a unos semáforos en donde nos
desviaremos a nuestra derecha, por la calle de la Virgen de la Murta,
a continuación llegaremos a un desvío, que nos indica, a la derecha
a la Casella y a la izquierda a la Murta, nosotros continuaremos a la
izquierda, en el siguiente cruce nos desviaremos a la derecha, ya
empezaremos a ver indicaciones a la Murta. Pasaremos por la
urbanización el Respirall y después de bajar una muy empinada
pendiente y sin abandonar esta carretera nos llevara al aparcamiento
de la Murta justo antes de la entrada a la izquierda, en donde
dejaremos nuestro coche.
Descripción de la ruta:
Dejaremos nuestro vehículo en el
amplio aparcamiento que hay poco antes de llegar a la entrada.
En el sureste de la comarca de la
Ribera del Xúquer se encuentra el Valle de la Murta, antiguamente
conocido como Vall dels Miracles, por las propiedades medicinales de
las plantas que allí crecían. Algunos eremitas habitaron este lugar
desde tiempo inmemorial, lo que dio lugar a que la Orden de San
Jerónimo fundara, en 1376, el Monasterio de la Murta. En el año
2004 el valle fue declarado Paraje Natural Municipal.
Comenzamos en la entrada al valle,
dando nuestro nombre y DNI al vigilante que normalmente esta los
fines de semana, a partir de la 8 horas. Hoy somos dos los caminantes
que comenzamos esta ruta, pues he quedado con Enrique Mondria,
compañero de trabajo que todavía no había subido a la Cruz. Así
pues comenzamos a caminar de frente por la pista forestal que va
hacia el monasterio, ignorando algunos desvíos que salen a izquierda
y derecha. Siguiendo la pista principal, nos encontramos, a nuestra
derecha, con una gran cruz de hierro: el Peiró. A sus pies una
pequeña senda ascendente nos lleva a la Nevera de la Murta del siglo
XVII, ubicada en umbría para conservar mejor la nieve, muy llamativa
tanto por la baja altitud donde fue construida, sólo 225 metros ,
como por la curiosa forma exterior, una casita cuadrada con techo a
dos aguas, inusual en las neveras valencianas. En el interior se
encuentra un pozo circular de 7 metros de diámetro y unos 6.6 metros
de profundidad. En el interior, visible desde tres aberturas (hay una
cuarta tapiada) veremos los agujeros que conformaban la escalera y
una polea por la que se extraía la nieve prensada del interior, que
era utilizada en el cenobio para usos alimenticios y medicinales.
Volveremos a la pista y pasaremos junto
un pequeño claro a la derecha, donde junto a un enorme pino y un
cartel indicativo de madera se inicia el sendero del Pas del Pobre,
conexión con el GR-236 Ruta de los Monasterios. El Pas del Pobre es
un collado que remontaban antiguamente desde el Paraje de la Casella
los peregrinos que se trasladaban entre los monasterios de la Murta y
los de la Valldigna (Simat), Aguas Vivas o el de San Jerónimo de
Cotalba (Alfauir). Al poco llegamos un cruce en donde veremos a
nuestra izquierda el Puente de Felipe II, construido e inaugurado en
1586 por el propio monarca en una visita que realizó acompañado por
el príncipe Felipe y la infanta Isabel Clara Eugenia y que es la
entrada al reciento de El Monasterio de Santa María de la Murta
(siglos XIV-XV), y que es un antiguo cenobio de la orden de los
Jerónimos, y en donde a la vuelta de nuestra ruta llegaremos por la
izquierda. Nosotros de momento seguimos la pista forestal de frente,
para ir poco a poco ascendiendo hasta llegar después de un par de
curvas, a otro cruce de pistas. Este va a ser el punto en donde nos
desviaremos a la bajada para pasar por la Font de la Murta, veremos
que hay un poste del PR. Seguimos a la derecha por la pista forestal
y en 1 kilómetro aproximadamente nos desviamos a la izquierda por
una senda en donde veremos que hay un poste del PR que indica la Cruz
del Cardenal.
Al iniciar la senda oímos unas voces delante, a escasos metros de nosotros, pronto las reconocemos son de Paco y Juanjo, también compañeros de trabajo que han cambiado la bicicleta de montaña por las botas, y que se dirigen como nosotros a la Cruz del Cardenal, camino que recorreremos juntos. A partir de aquí el desnivel se hace mas acusado y la senda, en ocasiones se hace estrecha, situándonos por debajo de las impresionantes paredes del Caball Bernat y su espolón, obteniendo también una magnífica vista del valle. Después de un rato de ascensión llegamos al Pas de Sant Sofí desde donde obtendremos muy buenas panorámicas de la zona costera por la otra vertiente de la montaña, con la montaña de Cullera, Favara, Sueca, Fortaleny, y los extensos campos de arroz, entre otros cultivos. Desde allí solo queda un pequeño esfuerzo más y llegamos a la cumbre, desde donde disfrutaremos aun más de las magnificas panorámicas que este emblemático pico nos ofrece. Aquí arriba disfrutamos de un merecido almuerzo con todos los ingredientes necesarios.
El recorrido de bajada lo realizaremos por el mismo lugar que en la ascensión, hasta que llegamos al cruce de pistas, aquí encontraremos un poste con indicación a la Font de la Murta, en donde nos desviamos por la derecha a buscar en unos 300 metros una senda que veremos a nuestra izquierda, aquí también encontraremos un poste indicativo del SL, a la Font de la Murta.
Al iniciar la senda oímos unas voces delante, a escasos metros de nosotros, pronto las reconocemos son de Paco y Juanjo, también compañeros de trabajo que han cambiado la bicicleta de montaña por las botas, y que se dirigen como nosotros a la Cruz del Cardenal, camino que recorreremos juntos. A partir de aquí el desnivel se hace mas acusado y la senda, en ocasiones se hace estrecha, situándonos por debajo de las impresionantes paredes del Caball Bernat y su espolón, obteniendo también una magnífica vista del valle. Después de un rato de ascensión llegamos al Pas de Sant Sofí desde donde obtendremos muy buenas panorámicas de la zona costera por la otra vertiente de la montaña, con la montaña de Cullera, Favara, Sueca, Fortaleny, y los extensos campos de arroz, entre otros cultivos. Desde allí solo queda un pequeño esfuerzo más y llegamos a la cumbre, desde donde disfrutaremos aun más de las magnificas panorámicas que este emblemático pico nos ofrece. Aquí arriba disfrutamos de un merecido almuerzo con todos los ingredientes necesarios.
Cruz del Cardenal |
El recorrido de bajada lo realizaremos por el mismo lugar que en la ascensión, hasta que llegamos al cruce de pistas, aquí encontraremos un poste con indicación a la Font de la Murta, en donde nos desviamos por la derecha a buscar en unos 300 metros una senda que veremos a nuestra izquierda, aquí también encontraremos un poste indicativo del SL, a la Font de la Murta.
Esta senda nos lleva de bajada y entre
abundante vegetación, destacando la murta cuyo nombre también se le
fue dado a este bonito valle. Nos conducirá hasta el monasterio,
pasando primero por la escondida fuente de la Murta, en donde
refrescamos un poco y alegramos la vista otro poco, y continuaremos
nuestra ruta siguiendo el trazado de un estrecho y bien conservado
acueducto, que conduce el agua desde la Fuente de Murta hasta las
balsas del Monasterio y por el que cruzaremos en varias ocasiones,
por medio de sus arcos y que en alguna zona nos ofrece la
contemplación de estos bonitos arcos. Este tramo es bastante húmedo
(propio de la umbría), e iremos con cuidado de no resbalar.
Bajada de la fuente |
Durante el recorrido y poco antes de
llegar al monasterio podremos ver a nuestra derecha las ermitas del
Calvario y Santa Marta. Justo antes de llegar al monasterio están
las dos balsas que recogen el agua procedente de la Font de la Murta.
En este punto Paco y Juanjo deciden continuar pues tiene algo de
prisa y nos despedimos de ellos, hasta la próxima vez. Nosotros
continuamos contemplando la bella estampa del monasterio,
comprenderemos perfectamente a los monjes cuando decidieron hacer de
este paraje un lugar de recogimiento y tranquilidad, que a lo largo
de los siglos se convertiría en un importante centro cultural y
espiritual visitado por personajes de la realeza, aristocracia y
clérigos destacados.
Visitaremos el monasterio y podremos
observar junto a la puerta renacentista, el antiguo claustro y la
iglesia. La Torre dels Coloms se mantiene todavía intacta. Con las
desamortizaciones del siglo XIX el monasterio quedó despojado de
todo su prestigio y esplendor siendo saqueado en diversas ocasiones.
Hace unos años se inició la recuperación del paraje y la
reconstrucción de sus edificios.
Junto al monasterio se encuentra la almazara, antiguo molino donde elaboraban el aceite, y el jardín “romántico”, un recinto pequeño con estanque que forma parte de la Casa Vella de la Murta, antigua hospedería del siglo XIX que los propietarios tras la desamortización adquirieron remodelando el hostal y reconvirtiendo en residencia temporal, con aspecto de palacio rural. También podemos encontrar la Capilla de Nuestra Señora de la Murta. Aquí podemos apreciar otro hábitat vegetal dentro del paraje: la naturaleza al servicio del hombre. Tras descansar, seguiremos el camino que pasa por delante de la casa. Tendremos a nuestra izquierda el Barranc de la Murta, con la vegetación propia de una zona húmeda. Continuando el paseo por la pista llegamos a la solana y a los antiguos campos de cultivos, hoy abandonados e invadidos por la vegetación mediterránea propia del lugar. Actualmente estas tierras de labor están repobladas de especies autóctonas. Obviaremos por la derecha una senda que sube al Cavall Bernat y la Cruz del Cardenal por la Mallada Verde. Habiendo llegado a los Corrales del monasterio tomaremos el camino de la izquierda e iremos bajando, siguiendo las señales del SL, hasta llegar de nuevo a la pista por la que comenzamos a caminar. Aquí continuaremos por nuestra derecha y nos dirigiremos hacia el Punto de Información, donde finalizará el recorrido de hoy.
Monasterio de La Murta |
Junto al monasterio se encuentra la almazara, antiguo molino donde elaboraban el aceite, y el jardín “romántico”, un recinto pequeño con estanque que forma parte de la Casa Vella de la Murta, antigua hospedería del siglo XIX que los propietarios tras la desamortización adquirieron remodelando el hostal y reconvirtiendo en residencia temporal, con aspecto de palacio rural. También podemos encontrar la Capilla de Nuestra Señora de la Murta. Aquí podemos apreciar otro hábitat vegetal dentro del paraje: la naturaleza al servicio del hombre. Tras descansar, seguiremos el camino que pasa por delante de la casa. Tendremos a nuestra izquierda el Barranc de la Murta, con la vegetación propia de una zona húmeda. Continuando el paseo por la pista llegamos a la solana y a los antiguos campos de cultivos, hoy abandonados e invadidos por la vegetación mediterránea propia del lugar. Actualmente estas tierras de labor están repobladas de especies autóctonas. Obviaremos por la derecha una senda que sube al Cavall Bernat y la Cruz del Cardenal por la Mallada Verde. Habiendo llegado a los Corrales del monasterio tomaremos el camino de la izquierda e iremos bajando, siguiendo las señales del SL, hasta llegar de nuevo a la pista por la que comenzamos a caminar. Aquí continuaremos por nuestra derecha y nos dirigiremos hacia el Punto de Información, donde finalizará el recorrido de hoy.
Gracias por la ayuda en la descripción
de la ruta a elseisdoble.blogia.com
Hasta pronto.
¡Hola Pepe! Bonita ruta que me has hecho recordar con tu metódica descripción y fotos.a seguir disfrutando de las sendas amigo.
ResponderEliminarUn abrazo.